
Bares y restaurantes platenses son los principales afectados en estas circunstancias ya que, a diferencia de años anteriores, las reservas disminuyeron. Pero también crecieron los pedidos de "último momento".
A pesar del contexto en el que estamos inmersos, es claro que los festejos que caracterizan a la ciudad no van a cesar este año por más impedimentos que se levanten.
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